El barril de referencia Brent, con el que Colombia opera, alcanzó la barrera de los 86 dólares la semana pasada. Dicha cifra no la veía desde su desplome en 2014, cuando cayó desde los 115 dólares hasta cifras por debajo de los 45 ese mismo año. Posteriormente, en 2016, quedó por debajo de los 30 dólares el precio del barril. La renuencia de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) para producir más barriles, la disminución en la producción por la crisis venezolana y las sanciones impuestas por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, a Irán son algunos de los causantes de esta crisis.
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¿Por qué subió el precio?
“La crisis del petróleo de 2014 fue una acumulación de factores. Principalmente por el excedente de reservas que existía a nivel mundial”, afirmó Arturo Barboza, consultor económico de la firma Berkley Research Group en Colombia, en entrevista para Directo Bogotá.
La disminución de la producción de petróleo por parte de la OPEP en cabeza de Arabia Saudí y Rusia, se debe a las sanciones económicas impuestas por EE.UU. a Irán, país miembro de la OPEP. La respuesta natural de no incrementar la producción aumenta los precios del producto ante una posible disminución de las cantidades disponibles, así como la eventual crisis geopolítica que vive Oriente Medio.
¿Por qué no puede haber acuerdo en fijar un precio estable?
Los principales líderes implicados en el escenario de política económica indican que no hay consenso sobre lo que se debe hacer. "Nosotros protegemos a muchas de estas naciones a cambio de nada, y ellos se aprovechan de nosotros imponiendo unos precios del petróleo altos. Eso no es bueno", afirmó Trump en su discurso ante la Asamblea General de las Naciones Unidas. Por su parte, Mohammed Barkindo, secretario general de la OPEP, le aseguró a la W Radio que la subida de los precios se debe a la crisis geopolítica y no a la escasez en el mercado.
¿Los precios van a seguir al alza?
En cuanto al aumento de los precios, puede haber dos factores importantes que señala Barboza. “El primero es el incierto panorama político en Venezuela, pues la producción de petróleo en el país se ha desplomado. Y el otro factor son las sanciones de EE. UU a Irán. Eso afecta los precios que modifique la OPEP, ellos van a tomar posturas frente a la comunidad occidental”.
Bajo esta lógica, las firmas especializadas creen que la tendencia se mantenga al alza para los precios del petróleo es.
¿Cómo impacta esto en la economía colombiana?
Para el escenario nacional lo más probable es que sí haya incidencias, pues “si los precios internacionales ascienden habrán presiones para que de igual forma aumenten los precios y los costos locales, y ese aumento de costos pueden aumentar también el costo de transporte y por ende el de hacer bienes y servicios”, agregó Barboza. Sin embargo, el economista prevé que en general es un beneficio para el estado colombiano.
¿Colombia se beneficiará de esto?
La razón del posible beneficio para Colombia se da ante la inminente bonanza petrolera, lo que se traduce en que podría no darse una época de “vacas flacas”, por ahora. Respecto a este asunto, las impresiones de Barboza se traducen en que cuando el expresidente Santos impulsó la reforma tributaria, lo tuvo que hacer en parte por la caída de los precios del petróleo. “Eso hace que el petróleo incida en un hueco fiscal considerable; un incremento sustancial del precio del petróleo ayudará a que una reforma tributaria por parte del gobierno del presidente Duque no sea tan austera”, señala el experto.
Sumado a estos factores, Colombia se encuentra como uno de los principales accionistas de Ecopetrol, lo que naturalmente beneficiará al Estado gracias al aumento de las ganancias de la empresa.
¿Y en la economía del día a día habrá cambios?
Para el colombiano de a pie, lo más seguro es que no vea cambios sustanciales producto del aumento de los precios del petróleo. La perspectiva de Barboza es que “el aumento del precio del barril es bueno en general para la nación y para el desarrollo, y quizás no vaya a mejorar inmediatamente la vida del colombiano, pero sí mejorará los indicadores de desarrollo a mediano plazo”.