Arte, diseño y comida en un mismo lugar. Boho Food Market llegó a la capital con la idea de permanecer en uno de los lugares más importantes y representativos de Bogotá: Usaquén. Este lugar es un espacio comercial que nació hace menos de un año con la idea de consolidarse y establecer un precedente muy fuerte que rescate el diseño colombiano como algo en lo que vale la pena invertir, algo que vale la pena mostrar.
Boho Food Market
FOTO: Lorena Munar
Boho cuenta con dos espacios: La entrada por la calle 6ta con 116, la cual llega directamente a Boho Food Market, en el primer piso está ubicado un mercado con variedad de frutas, carnes, chocolates, letreros de neón y un diseño que hace querer recorrer hasta el último rincón. Lo mejor del espacio es que manejan precios justos y proporcional a la calidad de los productos.
En el segundo piso de esa misma sección, el espacio es mucho más grande, está dividido en espacios para varios restaurantes con opciones muy diferentes, que se acomodan al antojo de cualquiera. Una opción liviana podría ser sushi, o algo más fuerte podrían ser unos nachos mexicanos, acompañados con una cerveza artesanal 100% bogotana, de El Sindicato. Para finalizar un postre de chocolate.
Si el plan es otro, la barra de coctéles está abierta hasta tarde, y algunos días el momento podría mejorar con un poco de jazz, o la banda invitada de la noche.
FOTO: Lorena Munar
Los restaurantes se reparten en dos pisos, que cuentan con diferentes ambientes según las opciones de comida y el antojo del chef. En el quinto piso quedará un rooftop (o terraza) que promete ser el lugar mas ameno de esta parte de Boho, sin embargo, a la fecha aún no se ha inaugurado.
Boho Expo
FOTO: Lorena Munar
El segundo espacio de Boho está intercomunicado por una plazoleta de mesas y sillas cubiertas con sombrillas al aire libre, que en los fines de semana se convierte en un stage de grupos de jazz o blues.
El espacio de Boho Expo está divido por stands al estilo de una feria de diseño, pero con espacios más amplios que permiten mayor transito de personas. Según Eva Giraldo, curadora de Boho Expo, el proceso de selección de diseñadores empezó hace más o menos 10 meses.
Eva cuenta que, en principio, el proceso empezó “buscando las marcas que nos interesaba que fueran parte y representaran el concepto de Boho Expo y la filosofía, que es diseño 100% hecho en Colombia, con una identidad muy clara y una calidad digna de exportación.”
A partir de eso, Eva y su equipo emprendieron una travesía de encontrar y contactar diseñadores en Bogotá, viajaron varias veces a Medellín y encontraron a varias de las marcas que cumplían los requisitos que buscaban.
FOTO: Lorena Munar
Gracias a la amplia experiencia de Eva, en ferias de diseño, la búsqueda apuntaba a un target muy claro, el equipo sabía lo que quería en un diseñador: Diseño y manufactura hecho 100% en Colombia y coherencia del concepto y del producto.
Una de las marcas que está en Boho Expo es Hebrante, una marca de diseño colombiana en la que diseñan, fabrican y confeccionan prendas y accesorios en tejido de punto para hombre y mujer. El objeto de Hebrante es reconocer la tradición familiar del quien es diseñador y diseñadora (Laura Matiz) de la marca, resaltando y valorando lo que con mucho esfuerzo lograron sus abuelos y padres. Las prendas son tejidas y confeccionadas por madres colombianas cabeza de hogar, quienes llevan trabajando con la familia del diseñador por más de cuatro años. Son el pilar de la marca.
FOTO: Lorena Munar
Cada una de las prendas que diseñan, fabrican y confeccionan tienen una historia que contar, una capa para mujer que a primera vista no tiene nada de diferente podría contar la historia de su realización.
Según Eva, la idea de tener emprendedores y diseñadores, como los de Hebrante y muchos más, hace que el diseñador o el emprendedor pueda ser la prueba de un mercado durante un tiempo que no implique una inversión tan grande y así pueda conocer un espacio comercial diferente en el que no ha estado, como es el caso de Usaquén que tiene muchas visitas y es corazón turístico de Bogotá, pero tiene una oferta de productos bastante básica. Por esta razón, los contratos en Boho son de tres meses en adelante, el diseñador decide si sigue otro trimestre o se detiene.
Respecto del proceso de selección para estar en Boho, el secreto del espacio y lo que lo hace diferente de otros espacios es justamente ese control que se hace. Eva dice que “todo ha sido un proceso súper personalizado, por eso nos hemos demorado tanto en seleccionar las marcas que están. Aplican todas en nuestra página web, a no ser que las contactemos directamente, nos conocemos, conocemos el producto, hacemos la prueba de calidad, identificamos cuales son los procesos que manejan y ahí definimos su participación en Boho”.
FOTO: Lorena Munar
Boho Expo, que hace parte de Boho Food Market, está inspirado en los mercados urbanos de todo el mundo. Como dato curioso, el primer Boho estaba pensado para hacerse en el centro, este es un proyecto que ya está en proceso y será lanzado a principios o mediados del próximo año. Pero Boho Expo surgió como un complemento a Boho Food Market, justamente por el espacio de Usaquén Plaza, que eran 1119 mt2 libres.
A los creadores del proyecto se les ocurrió que podía funcionar como una feria de diseño permanente, y ahí surgió la idea de Boho Expo, como respuesta a las necesidades de los diseñadores. El objetivo es ser un referente a nivel internacional de la creatividad y manufactura colombiana.
El creador y gerente de todo este proyecto de es Camilo Ayerbe, quien empezó en la vida de los negocios con el hotel de la Ópera. Tiene otro proyecto junto a un grupo de inversionistas que se llama BTG, otro que se llama Livinn: ambos, residencias para estudiantes en el centro. Después, llegó la idea de estos mercados urbanos, el primero fue Boho Food Market, el cual está planteado para otras zonas de Bogotá, Colombia y el mundo.
FOTO: Lorena Munar
Respecto a la aceptación del público, Eva cuenta que Boho tuvo una acogida fuerte, se habían planteado un soft-opening (que de soft no tuvo nada). Empezaron con las primeras marcas pioneras que creyeron en Boho desde el principio y se lanzaron a la aventura, esto fue para el período de septiembre-octubre, ya para octubre tuvieron más acogida y finalmente todas las marcas que estuvieron buscando desde febrero se decidieron a entrar una vez inauguraron. Para el primero de noviembre tienen el espacio a un 98% lleno.
La acogida ha sido lenta porque posicionarse no es fácil, tanto para los clientes, como para el diseñador independiente, hacer este tipo de inversiones, estabilizarse un poco y montar una tienda de un momento a otro. A a la fecha, para Eva se ha logrado el objetivo, que es tener a más de 133 marcas de lo mejor del diseño colombiano reunidas en un mismo lugar.