Por Ginna Morelo // Redacción Directo Bogotá
A propósito del Día Internacional de las Víctimas de Desapariciones Forzadas, algunos colombianos en el exterior acuden al apoyo internacional y los homenajes simbólicos para generar conciencia sobre los dramas que vive el país. Sus voces y clamores de justicia resuenan fuerte a pesar de la distancia.
Una lluviosa mañana de domingo, diez colombianos fueron llegando, con pausa y sin prisa, a la Potsdamer Platz, en Berlín. Cargaban unas pesadas bolsas llenas de zapatos listos para ser dispuestos en el espacio autorizado para el performance que conmemoraría el Día Internacional de las Víctimas de Desapariciones Forzadas.
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Botas pantaneras, tenis de colores, tacones, sandalias y hasta chanclas conformaron las hileras de historias no contadas que los colombianos en Berlín querían representar. “Ellos están en algún lugar, y nosotros los reclamamos”, dijo Luz Marina Hache, del Movimiento Nacional de Víctimas de Crímenes de Estado (Movice), quien viajó desde Bogotá para acompañar la actividad y pedirle al Gobierno alemán que reclame justicia para las víctimas al Estado colombiano.
Con su discurso, Hache, compañera del desaparecido Eduardo Loffsner, reclamó justicia y lanzó un grito por las 6402 víctimas de los mal llamados “falsos positivos” en Colombia. A esta cifra llegó la Justicia Especial para la Paz (JEP) tras contrastar tres fuentes de información: la Fiscalía, el Centro Nacional de Memoria Histórica y la Coordinación Colombia Europa-Estados Unidos (CEEU), que reúne a decenas de organizaciones sociales y de derechos humanos.
El performance tuvo lugar el domingo 29 de agosto. “Estamos acompañando, promoviendo, la memoria desde donde estamos”, explicó Saúl Lozano, uno de los colombianos organizadores de la actividad. Este y varios eventos similares se realizaron en diferentes ciudades del mundo el 30 de agosto, el Día Internacional de las Víctimas de Desapariciones Forzadas.