Por: Laura Ayala // Periodismo cultural
Directo Bogotá presenta un especial sobre uno de los podcast de no ficción que está a la vanguardia en Colombia: Presunto Podcast. Dos episodios no bastan es el segundo análisis de esta entrega.
Se me hacía tedioso escuchar con atención, y durante más de una hora, las voces de los que para mí eran unos desconocidos. Dos episodios después, esta idea se había esfumado y fue reemplazada por la sensación de haber aprendido gracias a los análisis en los que yo nunca había reparado. Ahora entiendo por qué Presunto Podcast es un referente de veeduría de la calidad de la información que dan los medios colombianos.
Parece que el equipo dirigido por Sara Trejos, quien lleva el hilo conductor de la conversación y se asegura de que todos participen sin dejar de compartir su opinión, sí sabe aprovechar la actualidad colombiana y “los papayasos” de los medios para proponer temas para su podcast.
En esta oportunidad son los capítulos número 36 y 37 los protagonistas, donde se critica la forma en la que los periodistas colombianos suelen cubrir las noticias judiciales y los eventos deportivos. La conclusión, en términos muy generales, es la misma: los medios y sus “profesionales” se dejan llevar por el show y por cualquier historia de triunfos o de derrotas que se acerque a lo tele novelístico.
Destaca la voz de Santiago Rivas, pues siempre marca una pauta, reconecta a quien dejó de prestar atención y hace comentarios contundentes, además de aportar humor. Al escucharlo en el segundo podcast, las voces ya no se me hacían tan desconocidas, aunque continuaran sin rostro.
Nada más con la sección de “Titulastres”, el abrebocas de cada capítulo, los integrantes del equipo demuestran su capacidad de desglosar toda una problemática a partir de un titular. La conclusión en este espacio se puede resumir en las palabras de Santiago: “Ya que la gente solo lee los títulos, hagamos bien los puñeteros títulos”.
Las evidencias que utilizan para argumentar sus tesis se reflejan en el recurso sonoro de poner titulares para demostrar que sí existe un show mediático, pero las entrevistas con expertos lucieron por su ausencia, al menos en estos dos episodios.
De la misma forma, en el episodio sobre el periodismo de temas jurídicos, eché de menos que hablaran de cómo los medios pueden llegar a influir en las decisiones que se toman sobre casos judiciales debido a la presión o, por el contrario, la cortina de humo que generan.
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Por último, y al notar que mencionaron a Vicky Dávila varias veces, me pregunté si el hecho de que siempre tengan algo que decir sobre ella no es precisamente lo que el medio que la contrató está buscando. Se critica que los medios le dan más importancia a hacer show para tener visibilidad que a informar y, efectivamente, en este caso le están dando más visibilidad a la reconocida periodista. De hecho, Santiago lo acepta, la noticia es Vicky Dávila.
No me refiero a que entonces no se pueda hacer crítica de los medios, pero: ¿Qué repercusión tienen sus comentarios? ¿Han logrado generar cambios en los medios de comunicación? En este orden de ideas, creo que el aporte de Presunto Podcast radica en abrirle los ojos a sus oyentes, no en esperar que los medios o los periodistas que vienen haciendo un trabajo mediocre empiecen a hacerlo bien.
Al final comprendí que la hora y media de audio que en un principio me había parecido demasiado, no es tiempo suficiente para las metidas de pata del periodismo colombiano. Que continúen los podcasts, por favor.
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