El productor ejecutivo Diego Carreño dice que no es solo un sello para artistas de las Farc, sino que están dispuestos a trabajar con la Fuerza Pública y el Gobierno con su idea de aportar a la paz desde el arte.
Un par de jeans, chaqueta azul y la gorra distintiva con que lo había visto en una ocasión previa, hicieron que fuera fácil distinguir a Diego Carreño, el artista visual bogotano que lidera junto con su equipo la iniciativa Independencia Récords. Eran las 3:30 pm del último día de la Feria Internacional del Libro de Bogotá, Filbo y Diego todavía no llegaba. Lo hizo hora y media después de lo que acordamos. Se disculpó por la tardanza y, junto con Pablo Araoz bajista de Alerta Kamarada, se ofreció a hablar con Directo Bogotá sobre el sello que pondría en perspectiva artística el tinte político del posconflicto.
Pablo Araoz (izquierda) y Diego Carreño//Filbo 2017//Fotografía tomada por Alfonso Narváez
El pequeño grupo conformado por Diego, Pablo y yo salió del pabellón 18 donde se encontraba el stand de Independencia, para ubicarse en un muro despejado cerca de una cafetería que daba “tintos gratis”. Con la incertidumbre de poder faltar el respeto con la pregunta sobre su vida privada, le comenté que era un personaje que recientemente había entrado al panorama público gracias a su gestión con el sello.
Diego Carreño tiene 30 años, estudió en la Facultad de Artes ASAB de la Universidad Distrital y en la escuela profesional de cine de Eliseo Subiela en Argentina. Antes de Independencia Récords, hizo parte de un colectivo llamado Coordinadora de Cultura Popular Nuestra América, un ejercicio de coordinación de iniciativas culturales y artísticas que tuvieran como fin la integración latinoamericana pues “había parches de Colombia, Argentina y Ecuador”. Hace parte de la Marcha Patriótica y también pertenece a artistas por la paz, que define como “un parche que convocamos después del plebiscito”.
Directo Bogotá (D.B.): ¿Cuál es el sueño o el ideal en que se cimenta Independencia Récords?
Diego Carreño (D.C.): Principalmente queremos ver un país en paz, donde no exista tanta inequidad, donde la gente pueda vivir del arte y el arte sea una herramienta de transformación, donde no haya peligro por cantar una canción, por decir algo, donde el pensamiento diferente no sea cercenado, donde podamos defender la vida a través del arte y la cultura.
D.B.: ¿De qué manera llegó a innovar Independencia Récords en el campo artístico?
Pablo Araoz (P.A.): Creo que nadie se la había medido a trabajar con el tema de la paz directamente y con el tema de la reconciliación a través del arte. Sí había propuestas pero tal vez nuestra novedad es que estamos intentando llegar a medios masivos de comunicación y a la gente con un mensaje diferente al que se ha llegado siempre: buscamos mensajes de conciencia, unificación, reconciliación. La novedad es que no estamos hablando de despecho, ni de tragas malucas ni de aguardiente, ni nada de esa vuelta sino que estamos hablando de nuestra Colombia y eso nos hace especiales.
D.B.: No es la primera vez que está dentro de una cooperativa artística pues antes de Independencia Récords manejó la Coordinadora de Cultura Popular Nuestra América. ¿En qué aspectos o fines se diferencia de la iniciativa actual?
D.C.: Esta era un espacio de coordinación de iniciativas políticas y artísticas, mientras que Independencia es una productora de contenidos artísticos para la paz. A la Coordinadora llegaban los parches y bandas a proponer apuestas políticas que incidieran en todo el tema de la integración latinoamericana, la reivindicación de los artistas como trabajadores de la cultura mientras que Independencia es una empresa solidaria que se ha construido a partir de donaciones y de nuestro trabajo. Por ejemplo, nosotros produjimos con las uñas el libro de Inty Maleywa (artista plástica de las Farc, que se encuentra realizando pedagogía de paz en las escuelas y contenidos artísticos “desde las montañas de Colombia”). Nos regalaron el papel, yo tengo una impresora litográfica y así empezamos.
Agenda con dibujos de Inty Maleywa//Pabellón Independencia Récords-Filbo 2017// Fotografía tomada de la cuenta de Instagram de Inty Maleywa @intymaleywa
D.B.: ¿Qué apoyo ha recibido?
D.C.: El de la gente. Al principio fuimos señalados por los medios de ser el sello de la guerrilla, pero somos una iniciativa de la sociedad civil. La gente se ha dado cuenta y ha respondido a ese llamado. El stand ha sido el más exitoso del pabellón, la gente ha comprado los productos que hemos hecho o que han donado otros artistas como Sistema Solar, Alerta Kamarada, Romperayo o Doctor Krápula.
D.B: ¿Recuerda qué medio los señaló?
D.C.: Blu Radio, con toda. Siempre estaba la pregunta tendenciosa sobre si éramos de las Farc y si no por qué les hacíamos discos. Nosotros no les estamos haciendo discos a las Farc sino que estamos proyectando artistas. En la Guajira, llegó un cabo que dijo ‘oiga yo también canto’ y nos empezó a mostrar. Cualquier artista que esté trabajando por la paz y reconciliación es bienvenido en Independencia, lo que sucede es que los medios son tendenciosos y han querido siempre recalcar que quien esté con la paz es insurgente o es castrochavista.
D.B.: ¿Quiénes conforman su equipo en la creación de Independencia Récords?
D.C.: Acá mi Lord Pablo Araoz; Fabio Ramírez, jefe de prensa y director escénico; Juan Ojeda; Andrés Cuervo encargado del tema del stand y yo. Empezamos Pablo y yo y hemos ido sumando a todo este equipo. También hace parte Gilbert Martínez como músico y estamos formando una banda de planta con músicos de primer nivel que pueda empezar a generar otro tipo de producciones, no solamente las de BlackEsteban y Martín Batalla.
D.B: ¿Por qué en este punto de la historia colombiana decidió lanzar Independencia y no hace unos años?
D.C: Principalmente porque es una apuesta de construcción de paz que nació de lo que estaba sucediendo en el país, que estaban votando por el No. Dijimos que le íbamos a abrir la puerta a la paz desde el arte y la cultura.
Inty Maleywa (centro), artista plástica fariana por la paz// Mural renace la esperanza// Fotografía tomada de la cuenta de Instagram @independenciarecords
D.B: Pero a propósito del tema que tocó anteriormente sobre el plebiscito y la apuesta de Independencia, ¿cómo el arte habría desmontado imaginarios sobre lo que sería el panorama del país luego del conflicto?
D.C.: No habíamos hecho este tipo de producciones porque no conocíamos a la guerrilla, ni a nadie que nos pudiera dar ese contacto para abrir esa puerta de trabajo por la paz. Si se hubiera dado una puesta artística que hubiera conmovido a la gente con mensajes contundentes otra habría sido la historia, ¿sí? Porque el arte logra mover unas fibras que los discursos no y la campaña del Sí se basó mucho en eso.
P.A.: Nosotros estamos haciendo pedagogía de paz, cuando vamos y producimos una canción para un artista o lo estamos apoyando es porque estamos creyendo en su bagaje como persona y como humanista para dejar un legado de paz a través del arte. Hay mucho talento pero también hace falta mucho acompañamiento, guía y escuela. Las cosas se dan coordinadas con el proceso de paz porque se empiezan a plantear el arte y la cultura como una necesidad de los colombianos para poder expresar cosas que no se han podido decir nunca o que no han sido escuchadas por los medios de comunicación y por mucha gente porque la gente cree que la verdad es la que sale en los noticieros y pare de contar. Toda esta idea también nació cuando con mi grupo Alerta Kamarada íbamos a tocar en la conferencia de las Farc en el Yarí invitados como parte de la pedagogía de paz y BlackEsteban se subió a cantar con nosotros una canción.
D.B: ¿Algún artista que admire y comparta su visión del arte como herramienta de reconciliación?
D.C.: Muchos: las Manos de Filippi, Paul Guillman, Silvio Rodríguez, Violeta Parra, Víctor Jara, por nombrar músicos. En Colombia está Pablo con Alerta Kamarada, Pablo Gallinazos, La Severa Matacera… hay mucha gente que le ha apuesta a la paz.
D.B: La artista plástica Doris Salcedo plasma la violencia por medio de sus obras, plantea que el arte por esencia es político y que siempre hay una ideología detrás. ¿Independencia Récords se libra de esta estigmatización o por el contrario siente empatía por algún tipo de pensamiento?
D.C.: La paz también es política. Independencia es una iniciativa en construcción que desde las líricas y demás hace un ejercicio político llamando a las gentes a la reconciliación, a la búsqueda de la justicia. Entonces sí, todo arte es político. Hubo una discusión porque Julio Correal, que ha hecho política con la música, está promoviendo una campaña para que Paul Guillman no venga a tocar en Rock al Parque porque es oficialista en Venezuela, pero aquel personaje nunca se pronunció por los falsos positivos y demás. Entonces el arte sí tiene que ver con la política cuando nos conviene y cuando no, no.
P.A.: En los grandes cambios en la humanidad, el arte y la cultura han trabajado con iniciativas políticas y populares. Brasil, Cuba, Argentina y Chile son lugares donde el arte ha estado presente porque la cultura es la voz del pueblo. Pensar que la política es solamente los que están allá en el Congreso es absurdo porque nosotros somos seres políticos por naturaleza.
D.B.: ¿Qué le ha permitido apostarle a que los colombianos consuman arte político?
P.A.: Artistas como BlackEsteban, Martín Batalla y Julián Conrado son nombrados por las Farc, la ONU y el gobierno como pedagogos de paz dentro del proceso de posconflicto. Vemos la oportunidad de que ellos participen activamente, por eso realizamos las charlas académicas, el concierto por la paz en Chapinero en el que pudimos ver que la gente quiere escuchar lo que antes no había podido.
Julián Conrado// La Fiesta de la paz// Fotografía tomada de la cuenta de Instagram @independenciarecords
D.B.: Hemos escuchado que plantea el arte como un medio de justicia social. ¿De qué forma pasa de ser un ente abstracto a la acción?
D.C.: La justicia social para el arte se da el día que los trabajadores de la cultura tengan condiciones dignas para ejercer su labor. Somos una productora independiente que abre caminos para que la gente pueda venir a hacer arte y pueda vivir de él. Ahora le redujeron los recursos a las convocatorias de MinCultura, aprobaron la Ley Naranja y eso está condenando el arte a la mercantilización, al control de contenidos.
(La ley Naranja propuesta por el senador del Centro Democrático Iván Duque busca "desarrollar, fomentar, incentivar y proteger las industrias creativas, entendidas como aquellas que generan valor en razón de sus bienes y servicios, los cuales se fundamentan en la propiedad intelectual". Entre sus objetivos se encuentra “triplicar las exportaciones de bienes y servicios creativos, y crear un reconocimiento a las empresas que generen mayores exportaciones en estos sectores”).
D.B.: Tengo entendido que Independencia Récords ha organizado producciones artísticas solo con exguerrilleros, ¿de qué forma pretenden involucrar a las víctimas en el cooperativo?
D.C.: No solamente hemos trabajado con exguerrilleros. Estamos promoviendo ilustraciones y discos de otros artistas. Nuestro disco ‘Reconciliación’ sí es un trabajo que se hizo con BlackEsteban, con Martín Batalla y con Reincidentes Bogotá que hizo un ejercicio en una zona veredal transitoria. Actualmente, estamos planeando unas giras distritales de pedagogía artística de la paz. Esperamos hacer ejercicios de caracterización con la gente de las localidades, con todos los artistas que se quieran acercar a trabajar con Independencia en el tema de arte y paz.
Canción "Unamos nuestras voces"//Reincidentes Bogotá & FARC-EP
D.B.: Precisamente BlackEsteban, Martín Batalla, Julián Conrado son algunos de los nombres que están bajo el sello de Independencia Récords. ¿Cómo fue el proceso de acercamiento a los excombatientes?
P.A.: Veníamos de una gira por Europa y nos preguntaron si queríamos participar en un concierto por la paz en la Serranía de la Macarena. Para nosotros fue un tema de orgullo porque creemos firmemente en la paz y cuando el grupo nació hace 21 años partió de la creencia de que la música es el elemento que ayuda a generar un equilibrio en la humanidad. Cuando Esteban subió a cantar con nosotros, duró media hora y hubo un feeling. Al bajarnos, le dije que lo quería producir y la propuesta tomó forma al volver a Bogotá: artistas civiles dándoles una mano a un guerrillero que está entregando las armas y que quiere coger el micrófono. El acercamiento fue paulatino y se dio la posibilidad de ir a una zona veredal a grabar el tema de Esteban. Me devolví y busqué músicos que quisieran aportarle a la paz. A Martín Batalla lo conocí por un video en el que hace música reggae y le presenté la propuesta. Más adelante con Diego se consolidó la iniciativa de Independencia pues pese a que llevo 21 años con Alerta Kamarada y tengo mi sello disquero ‘One Two Records’, nos surgió la inquietud de hacer algo más grande. Nos dio la locura de participar en la Feria del Libro, pasamos la propuesta y fue muy bien recibida porque este año estaba muy vinculada al tema de la paz y es así que nace la experiencia de la conformación de Independencia.
BlackEsteban (izquierda), Martín Batalla, Mario Muñoz (centro), Diego Carreño, Matías Mera (derecha)//Entrevista en latinoscopio// Fotografía tomada de la cuenta de Instagram @emitclasalle
D.B: Además de aliarse con el mercado artístico, Independencia se relaciona con el colectivo Educadoras Hijas del Pueblo en una apuesta por un modelo educativo donde el perdón sea eje central. ¿Cómo se mezcla educación y arte?
D.C.: Hijas del Pueblo se acercó a Independencia porque vieron el trabajo que veníamos haciendo previo a la Feria del Libro. Ellas querían mostrar el tema de las infancias hacia la paz, hablamos con la Cámara Colombiana del libro y se logró abrir el espacio. Fue muy bonito porque hicieron un diálogo a partir de todo el trabajo que han hecho ellas en materia de educación popular en zonas veredales y en distintos espacios de la ciudad, en temas de infancia y cómo va a recibir el país la nueva generación, no solo a los menores de edad que estaban combatiendo sino también los niños que están naciendo en medio de una Colombia sin guerra. También nos hemos acercado a organizaciones como la Escuela Pedro Nel Jiménez y le hemos abierto el espacio al que quiera trabajar haciendo educación desde el arte y la cultura. Precisamente estamos haciendo ejercicios de formación para artistas que es otro de los proyectos a corto plazo que te mencionaba en materia de educación no solo en música.
D.B.: ¿Los medios han sido agentes informadores o desinformadores con respecto al proceso de paz?
D.C.: Frente al proceso de paz tienen una gran responsabilidad y es que desde los micrófonos muchas veces incidieron en fomentar mensajes sesgados. Como te comenté, Blu Radio nos acusaba de ser el sello de las Farc y no una iniciativa ciudadana. Ni siquiera se tomaron el tiempo o la molestia de ver qué era Independencia. Preguntas que inciden en la gente porque ven las noticias o los escuchan y no tienen más accesos a otro tipo de información sino la que dan los medios como Caracol y RCN.
Álvaro Rodríguez- actor (izquierda) y Jesús Santrich- ex comandante guerrillero (derecha)//Conversatorio "Caminando hacia una cultura de paz" Filbo 2017// Fotografías tomadas de la cuenta de Instagram @independenciarecords
D.B: ¿En qué otros campos además del musical y plástico planea incursionar Independencia Récords?
D.C.: Somos la combinación de todas las artes para la paz. Hicimos una alianza con Casa Teatro Estudio Alcaraván que estuvo en los paneles, viene la producción del video de BlackEsteban y estamos planteando un seriado argumental sobre los seis puntos del acuerdo de paz.
D.B.: ¿Contempla una alianza con el Gobierno?
D.C.: Sí, ¿por qué no? Somos un emprendimiento cultural y vimos que el Ministerio de Cultura lanzará unas convocatorias para emprendimiento y nos vamos a presentar. No le cerramos las puertas al trabajo con la institucionalidad.
P.A.: Presidencia estuvo muy activa y estuvo en una charla académica con nosotros y se ha mostrado muy receptiva a la propuesta.
D.B.: ¿Qué retos y proyectos tiene a futuro Independencia Récords?
P.A.: El reto es consolidarnos como una casa productora que trabaje de una manera cooperante, solidaria y siga manteniendo el mensaje que queremos llevar, con artistas que trabajen desde diferentes sectores como la Policía o los militares. Allí hay muchísimos artistas sin la posibilidad de comunicarse y actuar. La idea es que esto sea una alternativa de trabajo para el posconflicto donde mucha gente pueda encontrar sustento y desarrollar su pasión a otro nivel. Esperamos tener incidencia en los medios masivos y que la gente que se quiera vincular con nosotros lo haga porque finalmente nuestro objetivo es ayudar a desarrollar la paz en Colombia. Queremos que nuestros hijos y los hijos de ellos puedan gozar de lo que nosotros no, de un país con justicia social, oportunidades y respeto por la otredad por medio de la política y la pedagogía unificadora. Ese es el grano de arena que queremos dejar en la historia.