Parques Nacionales Naturales de Colombia y la Universidad de la Amazonia se unieron para conocer y documentar la biodiversidad presente en la Serranía de Chiribiquete, a través de una expedición que finalizó ayer.
Parque natural Serranía de Chiribiquete
El área protegida más grande del Sistema de Parques Naturales Nacionales y del Sistema Nacional de Áreas Protegidas de Colombia, con una extensión aproximada de 2’782.354 Hectáreas y ubicada en Solano, Guaviare, fue estudiada por científicos especialistas en aves, peces, mamíferos, plantas e insectos.
En esta oportunidad, los científicos de la Universidad de la Amazonia y Parques Nacionales, focalizaron su atención en dos zonas de la parte sur de Chiribiquete: Puerto Abeja y Caño Guamo. La investigación realizada en estos dos lugares, a futuro, “permitirá la creación de un puesto de control en Caño Guamo, para darle un manejo adecuado a la fauna y la flora de este lugar, y en Puerto Abeja para determinar cómo se van a manejar los residuos sólidos y la creación de un centro de investigación para pasantes de la universidad”, afirmó David Novoa investigador de la dirección territorial de la Amazonia.
Para esta expedición se contó con ocho personas de la Universidad, tres funcionarios de Parques Nacionales y un camarógrafo. Este personal estuvo encargado de recolectar muestras de diferentes tipos de vegetación y especies animales para complementar las líneas de investigación que ya se han trabajado.
Para el territorio colombiano es fundamental conocer la biodiversidad de este parque, debido a que hay un corredor que permite el desplazamiento de las especies hacia el nororiente, sur y sur oriente del país. Por tanto, “conocer las especies que allí habitan da una idea de la dinámica de dispersión y su movimiento. Además de ofrecer información sobre los usos que tenían los pueblos indígenas que vivían allí y los pueblos que actualmente están en aislamiento”, afirmó Novoa.
Por otro lado, los parques nacionales funcionan con un plan de manejo que calcula lo que se debe hacer para mantener un área protegida en un periodo de 5 años, por ello, “lo que se encuentre en esta expedición dará cuenta de lo que hay y cómo se puede cuidar”, afirmó Ivonne Cueto, educadora ambiental de la dirección territorial de la Amazonia.
Puesto que este es uno de los ecosistemas montañosos más importantes de la Amazonia colombiana, que se caracteriza por su formación geológica, por lo ríos que allí se encuentran y por su particular conformación de los ecosistemas, se planea una expedición para finales del 2017, donde se estudien zonas que no han sido registradas.