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Bogotá en obra negra

Juan David Ríos // Periodismo Digital


A pocos meses de que Enrique Peñalosa entregue la Alcaldía a Claudia López, alcalde electa en las elecciones regionales del 27 de octubre, Bogotá Mejor Para Todos adelanta 2500 obras que demuestran la labor del regente distrital en curso.

FOTO: Promoción de la campaña “Impopulares pero eficientes” de la Alcaldía en las calles de Bogotá. Foto tomada por Juan David Ríos.

Enrique Peñalosa deja la alcaldía de Bogotá este 31 de diciembre, y con esta deja a un lado los problemas que tuvo que pasar en sus cuatro años de mandato. Dentro de sus banderas de gobierno se encontraba el mejoramiento del sistema integrado de transporte público, la planeación del metro elevado, la construcción de Transmilenio por la séptima y el desarrollo de la Avenida Longitudinal de Oriente (ALO).

Con una tasa de impopularidad alta, la administración Peñalosa busca resaltar los proyectos que han evolucionado y las obras viales que ha entregado. En la campaña Impopulares pero eficientes, se reconocen 2500 obras que están en proceso de licitación o construcción y de ellas, 161 son proyectos sobre mejoras de la malla vial de la ciudad.

El alcalde ha entregado en el transcurso de su mandato; el Transmicable, que beneficia a los habitantes de la localidad de Ciudad Bolívar; alrededor de 64 parques en diferentes sectores de la ciudad; y un sinnúmero de obras viales de pequeña escala para el desarrollo de la movilidad. Todos ellos con inconvenientes ambientales, de infraestructura y de contratación.

 
 

Sin embargo, son más las trabas que el mismo Distrito le ha impuesto a Peñalosa. El pasado 29 de agosto del 2019, el juzgado 23 Administrativo de Bogotá le ordenó al Instituto de Desarrollo Urbano (IDU) la suspensión inmediata de la licitación de Transmilenio por la séptima debido a que los estudios no eran los óptimos para iniciar la construcción.

Lea también: Lo que los renders no muestran del Transmilenio por la Séptima

 
 

Es así como algunas obras se quedan en ‘veremos’ y el siguiente alcalde o alcaldesa de Bogotá será el responsable de darle continuidad a estas. El presupuesto que tuvo la Alcaldía en la construcción de las 165 obras fueron gastados a toda velocidad antes de la hora límite de Bogotá Mejor Para todos.

De las obras que el alcalde deja para la siguiente administración, Directo Bogotá resalta tres de ellas que efectivamente están siendo un caos para la movilidad tanto vehicular como peatonal.

Una Zona Rosa destapada

Esta zona es reconocida como el espacio de diversión capitalino. Va desde la carrera 15 hasta la carrera 11, conectando la calle 80 incluso hasta la 85. Lleva ya siete meses de construcción en donde se estima una demora de diez meses más. La Zona Rosa se encuentra en obra negra debido a los adelantos que hacen en varias calles y carreras. Centros comerciales como Andino y El Retiro tienen sus accesos principales cerrados debido a las demoras en su contratación y licitación.

 
 

La 19 en demora

En el proceso de peatonalización de la carrera séptima, el pasado julio el IDU inició las obras de reconstrucción y adecuación en el cruce de esta avenida con la calle 19. (En esta obra se invertirá más de $41.821 millones de pesos y busca beneficiar a cerca de dos millones de personas que a diario transitan por este sector./B) Se estima que quede finalizada para el segundo semestre del 2020.

 
 

La séptima sin salida

Todavía sigue en construcción la peatonalización de la carrera séptima que fue adjudicada en 2015 por el exalcalde Gustavo Petro. Fue en el 2018 que el consorcio de Peatones GO, quien se encargaba del tramo, quedó en quiebra y no pudo completar la obra. Hoy en día se registra un avance del 42% en los más de 36.000 metros cuadrados que se busca renovar. Este proyecto que busca darle una visión diferente al centro de la ciudad, tiene como moradores a los comerciantes de segunda que se ubican sobre la carrera y obstruyen el tránsito.

 
 

Sin embargo, estas obras son una pequeña muestra de la obra negra que se encuentra en Bogotá. A Claudia López, siguiente alcalde de la ciudad, le tocará recibir la ciudad ‘en planos’ y buscar la financiación pertinente para poder, como dice el dicho, estucar y arreglar las paredes.

 

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