Con motivo de su reciente visita, se realizaron distintas obras de revitalización vial y de espacios comunes en toda la localidad.
Fotografía tomada de: Archivo de imagen de la página oficial de la Alcaldía Local de Teusaquillo.
La localidad de Teusaquillo tuvo el honor de hospedar al sumo pontífice este año en la Nunciatura Apostólica de Bogotá, única sede representativa del Vaticano en Colombia. Por este motivo, se iniciaron labores restaurativas de los espacios comunes de la localidad.
Con el fin de hacer más amigable el sector a la mirada del Papa Francisco, se realizaron jornadas de reparamiento de vías, recuperación de andenes, se pintaron las fachadas de los lugares más cercanos a la nunciatura, se construyeron cintas de ajuste en adoquín, se realizó la instalación de malla electrosoldada y fundida del andén con concreto premezclado y se llevaron a cabo jornadas extensas de limpieza en las calles y postes de la localidad.
No obstante, estas acciones fueron vistas como “un milagro” para algunos como lo menciona Carlos Robledo, habitante del sector la Soledad, quien sostiene que “si no se hubiera presentado la visita del papa no se hubieran acelerado o contemplado ciertos proyectos de infraestructura en la Localidad”. Además, contempla que “la localidad de Teusaquillo se vio beneficiada de buena manera con esta visita pero es importante que se mantengan estas jornadas de cuidado y preservación de nuestra localidad no solamente cuando viene alguna personalidad relevante”.
Aunque la zona en la que está ubicada la Nunciatura fue la más intervenida, Paola Gómez, jefe de la oficina de prensa de la Alcaldía Local de Teusaquillo, sostiene que “no se dejó de lado las periferias” argumentando que la localidad se vio activamente dispuesta a colaborar en estas acciones de embellecimiento de los espacios en todos los barrios pertenecientes al sector y que “estos eran proyectos que ya venían de un tiempo atrás y que se aceleraron por la visita privilegiada del papa a la localidad”.
Lo anterior también lo afirma Rubiela Andrade, presidenta de la junta de acción comunal, quien dice que “mensualmente realizamos limpieza de los parques, cuidamos el patrimonio arquitectónico, sembramos árboles y jardines”. Además, enfatizo que “la alcaldía local también ha sido de gran colaboración para que nuestro huésped ilustre y los ojos del mundo nos vean como una comunidad que cuida sus entornos siempre y como debe ser ya que nuestra localidad es muy importante y debe ser ejemplo para otras”.
Si bien es cierto que se revitalizó la localidad en el menor tiempo posible por la visita del papa, el proyecto “Contrato IDU 1092 de 2016”, llevado a cabo por el Consorcio JHG, ya llevaba en adelanto varias de las obras pertenecientes a la malla vial del sector, no solo de Teusaquillo, sino también de 13 localidades más que se vieron beneficiadas de estas brigadas de reacción vial en vías arterias no troncales.
Adicionalmente, un habitante cercano a la Nunciatura, Sergio Barón, aseguró que “Hace menos de dos meses ya se habían puesto en marcha la instalación de cámaras de seguridad en puntos críticos de la localidad lo cual había sido una petición propiamente de la comunidad y fue cumplida”. También destacó que “la JAL (junta de acción comunal) es una de las entidades que más ha velado por el bienestar de la localidad”.
Finalmente, se estima que en el proceso de adecuación y revitalización de la localidad se generaron 800 empleos directos e indirectos de reparación de vías entre mayo y agosto de este año y otros 220 a personal de limpieza y reparamiento de zonas verdes especialmente del parque Simón Bolívar, el cual fue el lugar de encuentro eucarístico de miles de feligreses de todo el mundo.