Durante los últimos meses, la localidad de La Candelaria atravesó una serie de cambios importantes, como por ejemplo la restauración de las fachadas, el arreglo de los huecos de las vías, el refuerzo de la seguridad y darle vida al Chorro de Quevedo; todo esto con el fin de crear una ruta de turismo planteada como una de las políticas públicas de la alcaldía de Enrique Peñalosa.
Estado de las fachadas en la calle 13 con carrera 2// Fotografía tomada por: Sebastián García. 2017
Pintura en las fachadas ¿Verdadera restauración?
Desde hace seis meses, entre las calles 10.ª y 11 y las carreras 2.ª y 9.ª se han reavivado los colores da un de los sectores más antiguos y con más historia de la ciudad.
Estas casas llevan cien años estado abandonadas, sin embargo, al hacer parte del patrimonio histórico de la ciudad, la restauración necesita un permiso del Instituto Distrital de Patrimonio Cultural que, de acuerdo a la normatividad, las obras permitidas en los inmuebles de este tipo son: primeros auxilios, reparaciones locativas, reforzamiento estructural, rehabilitación, restauración, obra nueva, ampliación, consolidación, demolición, liberación, modificación, reconstrucción y reintegración.
Fachada de una casa de la calle 13 ya restaurada y re pintada// Fotografía tomada por: Sebastián García. 2017
La restauración de las fachadas según la alcaldía se hace analizando “la composición arquitectónica y constructiva de las fachadas”, luego “se hace un estudio de colores, tomando muestras de las distintas capas de pintura que tienen los muros, y carpintería de las fachadas, y se verifican los colores que a lo largo del tiempo han tenido. A partir de lo encontrado, se toma la determinación de cuáles son los colores más convenientes para que representen las condiciones.”
De acuerdo con esto ya van en total 200 fachadas de casas coloniales de la localidad de la candelaria que han sido pintadas. En promedio se han recuperado 109 inmuebles en la zona, en el proceso han participado tanto expertos como propietarios y voluntarios de la comunidad. Como lo asegura la subdirectora del Instituto Distrital de Patrimonio Cultural, Dorys Patricia Noy: “tiene que haber una apropiación de la comunidad y que las personas se empiecen a solidarizar con el cuidado de las fachadas”.
Pese a los avances el proyecto se ha demorado más de los esperado y la restauración ha sido solo de las fachadas de la casa y no el refuerzo de sus estructuras.
Huecos tapados
Las vías no se han quedado por fuera de este plan. Ya van 700 metros intervenidos, sobre todo intersecciones, lo que ha generado mejorías en el tráfico del sector. Además, han desarrollado arreglos en cuanto a huecos en los andenes para favorecer la circulación peatonal.
Según el concejal Roberto Hinestrosa, la localidad de la Candelaria es la más afectada por el deterioro en los andenes en un 71% y es uno de los lugares priorizados de la ciudad por ser uno de las localidades más frecuentadas a diario por lo que la recuperación de las vías demorara más de lo esperado.
Además, Camilo Riaño, ingeniero civil que apoya a la provisión de los contratos de obras en Bogotá, afirmó que este año se han intervenido 800 metros en andenes.
Chorro de Quevedo
El Chorro de Quevedo repintado y restaurado. Foto Tomada por Sebastián García. 2017
En agosto del 2016 la Alcaldía de Bogotá inició unos talleres en la ciudad con el fin de crear una política pública de turismo. El proyecto, buscaba dejar una hoja de ruta a 20 años y estaba acompañado de un plan de obras que les cambiaría el aspecto a los sitios más visitados de la ciudad. Uno de ellos será el tradicional Chorro de Quevedo. Este es uno de los patrimonios históricos y culturales más importantes de la ciudad, pues, como aseguran algunos historiadores y cronistas, la fundación de Bogotá fue posiblemente dada en el Chorro, ya que poseía las condiciones aptas. Se caracterizaba además por ser el único lugar que tenía una fuente de agua mucho antes de que existiera el acueducto.
Pero por falta de cuidado y mantenimiento el Chorro de Quevedo llevaba 31 años sin que la pileta produjera agua, las fachadas estaban deterioradas y el suelo del lugar se encuentra en mal estado. Durante cinco meses, el Instituto Distrital de Patrimonio Cultural realizó el mantenimiento y el miércoles 19 de julio se reinaugurar. Fachadas remodelas, cambio de suelo y la restauración completa de la pileta. Sin embrago, la restauración ha recibido muchas críticas, debido a que el suelo fue hecho en semento con impresiones y no se mantuvo el material inicial. Felipe Duque asesor del concejo de Bogotá argumenta que esto se hizo con el fin de preservar el buen cuidado del suelo, ya que los adoquines se dañan con mayor facilidad y se los roban mucho más.
Pese a que la alcaldía, según Duque, pensaba que la restauración serviría para la integración y el esparcimiento de los habitantes de Bogotá y turistas, por la implementación del nuevo código de policía este plan se cayó y el concepto del Chorro cambió; ni cuenteros, ni chicha en la calle, ni mucho menos personas sentadas al lado de la pileta, ahora ir al chorro consiste en ir a caminar observar y tomar algo dentro de los establecimientos que quedan alrededor.
La Ermita de San Miguel del Príncipe con la fachada restaurada y repintada// Fotografía tomada por: Sebastián García. 2017